El líder yemení Ansarulá dijo el sábado (21 de septiembre) que “será de interés para la coalición liderada por Arabia Saudí beneficiarse de la iniciativa de paz presentada por el presidente del Consejo Político Supremo de Yemen”.
“Cuando las fuerzas de agresión (coalición saudo-emiratí-estadounidense) pongan fin a su agresión, bombardeo y asedio contra el pueblo yemení, el Ejército y las fuerzas de Ansarulá detendrán sus ataques con sus drones y misiles contra Arabia Saudí”, dijo Abdel Malek al Huthí, con motivo del quinto aniversario de la liberación de la capital, Sanaa.
“De lo contrario … ataques nuestros más dolorosos alcanzarán las profundidades de sus áreas y sus instalaciones económicas, petrolíferas y vitales más importantes”, advirtió el número uno de Ansarulá.
“No habrá líneas rojas desde este momento”, advirtió.
Sayyed al Huthí una vez más pidió a los ciudadanos de estas regiones “que tengan cuidado y se mantengan alejados de estas instalaciones”.
Por su parte, Mohammed Ali al Huthí, advirtió el sábado a Arabia Saudí “contra el rechazo de la iniciativa del presidente Mashat” en un mitin que marcó la liberación de la capital.
“Si rechazan la iniciativa, les haremos más daño”, dijo el jefe del Consejo Superior Revolucionario de Yemen, diciendo que “cualquier escalada será respondida con otra escalada”.
El presidente del Consejo Político de Yemen, Mehdi Mashat, hizo una propuesta de paz a Arabia Saudí, comprometiéndose a detener los ataques contra el territorio saudí, siempre que el régimen saudí haga lo mismo con su país.
La iniciativa de las fuerzas yemeníes (Ejército + Ansarulá) se produce una semana después de una importante operación el 14 de septiembre contra dos instalaciones petrolíferas en el este de Arabia Saudí. Este ataque provocó la interrupción de la producción de petróleo del reino, el mayor exportador del mundo, lo que provocó un aumento de los precios.
Mientras tanto, el enviado de la ONU para Yemen, Martin Griffiths, saludó el sábado (21 de septiembre) la propuesta de las fuerzas yemeníes de detener sus represalias contra Arabia Saudí, diciendo que esto debería conducir a un fin de la guerra en Yemen.