El ex embajador saudí en Washington y antiguo jefe del servicio de inteligencia saudí, Bandar bin Sultan ben Abdelaziz, se encuentra entre los arrestados por las fuerzas de seguridad del régimen de Riad, informa la publicación británica Middle East Eye (MEE) citando fuentes informadas. Él fue también uno de los principales promotores de la guerra de Siria y padrino de los grupos terroristas.
“Durante los recientes arrestos, los hijos del (ex ministro de Defensa) príncipe Sultan ben Abdelaziz también han sido detenidos y sus cuentas bancarias congeladas”, se lee en el sitio web. El príncipe Bandar bin Sultan bin Abdelaziz, un ex embajador saudí en Washington, es una de las personas más famosas arrestadas. Tenía relaciones muy cercanas con el ex presidente de los Estados Unidos George W. Bush”.
Según esta fuente, las autoridades saudíes no han proporcionado ningún detalle sobre el destino que aguardaba a este príncipe saudí; simplemente dijeron que estaban investigando uno de los casos de corrupción financiera que afecta a una serie de contratos de venta de armas entre el Reino Unido y Arabia Saudí, conocida como Al Yamamah (la paloma en árabe), en los que participó Bandar ben Sultan ben Abdelaziz.
Tras la firma de los contratos de armas, por valor de 60.000 millones dólares, Londres ingresó una enorme suma de miles de millones de dólares en la cuenta bancaria personal de Bandar ben Sultan Ben Abdelaziz.
Con la excusa de la lucha contra la corrupción, el gobierno saudí ha lanzado desde la semana pasada una gran campaña de arrestos. Varios príncipes y ministros, en activo o retirados, están en la lista de arrestados.
Según Middle East Eye, el registro real de los arrestados es dos veces mayor que las estadísticas oficiales y ha superado el número de 500.
“Algunos de los arrestados han sido golpeados o torturados durante los interrogatorios, por lo que necesitan atención médica”, revela el sitio web.
Según algunos informes, el régimen saudí utiliza la tortura para extraer información sobre las cuentas bancarias de los detenidos.
Source: Middle East Eye